V de sublime! Un libro atrevido con textos que no tienen miedo de decir las cosas por su nombre.
Nueve poemas que incomodan a los "conservadores", desafían a los "revolucionarios", abofetean a los "moralistas y puritanos" y motivan a luchar aún más contra el feminicidio.
En
V de sublime, la
Vulva -no la vagina- toma la voz para declarar su independencia, su libertad, en un manifiesto poético contra aquellas voces centenarias que, a lo lago de la historia, han intentado -y continúan intentando- castrar, dominar y apagar la voz del sexo femenino.
En
V de sublime, la
Vulva derrota a la "manzana pecadora". Con un lenguaje lírico, diseños insinuantes, fotografías artísticas y metafóricas, la
Vulva se transforma en una voz acusatoria que no teme apuntar con el dedo a aquellos que aún intentan con todo tipo de violencia -bajo miles de pretextos-, subyugar la integridad de la mujer.
Estos poemas colocan el dedo en la llaga de la sociedad contemporánea -ella aparentemente lucha por la igualdad de los derechos sexuales de las mujeres en la sociedad y, por ende, en otras esferas- que, a pesar de ya estar en la tercera década del siglo veintiuno, aún tiene problemas con la aceptación del cuerpo femenino: un tabú contradictorio que aún provoca discursos discriminatorios en más de un sector de la sociedad.
Los nueve poemas visuales (
la eternidad de la carne, antes de la mentira, la palabra que asusta, el origen, vulva, la condena, los perversos, tiempos modernos, sobrevivencia) mezclan la palabra, las formas y las imágenes para criticar y satirizar a aquellos que condenaron, han condenado y continúan condenando el cuerpo de la mujer por cuestiones religiosas y sociales.
La lectura de
V de sublime es un desafío para cualquier lector.